¿Hasta qué punto somos conscientes y hacemos a los otros conscientes de la tarea de completar la vida y los dolores de Cristo? ¿Lo entendemos?¿Qué hacemos?
¿Cuántos de nosotros se sienten responsables de anunciar el mensaje de Cristo?
¿Lo aceptamos y lo anunciamos completo o lo mutilamos?
¿Somos de verdad hombres de esperanza, y qué esperanza?
¿Qué gloria buscamos y qué gloria predicamos?
¿Estamos convencidos que sólo en Cristo la humanidad logrará su madurez?