Hay hombres y mujeres que se dedican a pescar hombres y mujeres casados y solteros incautos, y los enredan en las mayores bajezas. Esos no son salvadores sino asesinos de la moralidad. Hay también líderes del materialismo, del ateísmo, que envenenan a la juventud. Esos no salvan sino matan. Todos éstos son como el mono que bajo el pretexto de salvar sacó el pez del agua y lo puso a secar al sol. ¡Cuántos monos hoy andan en la calle sueltos y dándoselas de pescadores, de amigos, de modernos, y a veces son catedráticos y jefes de oficina! Abundan los falsos salvadores, pescadores... Cine, TV, revistas, libros que ridiculizan los criterios cristianos o inculcan criterios falsos. "El pez no se ahoga en el agua, el pez se muere en el aire". El hombre se ahoga sin moral, sin religión, sin Dios, sin oración. El que quita al hombre la fe y la esperanza no le dan vida sino muerte.
Falsos pescadores que no dan vida sino muerte
Hay hombres y mujeres que se dedican a pescar hombres y mujeres casados y solteros incautos, y los enredan en las mayores bajezas. Esos no son salvadores sino asesinos de la moralidad. Hay también líderes del materialismo, del ateísmo, que envenenan a la juventud. Esos no salvan sino matan. Todos éstos son como el mono que bajo el pretexto de salvar sacó el pez del agua y lo puso a secar al sol. ¡Cuántos monos hoy andan en la calle sueltos y dándoselas de pescadores, de amigos, de modernos, y a veces son catedráticos y jefes de oficina! Abundan los falsos salvadores, pescadores... Cine, TV, revistas, libros que ridiculizan los criterios cristianos o inculcan criterios falsos. "El pez no se ahoga en el agua, el pez se muere en el aire". El hombre se ahoga sin moral, sin religión, sin Dios, sin oración. El que quita al hombre la fe y la esperanza no le dan vida sino muerte.
