Cuenta una fábula que tres aprendices de demonios estaban recibiendo su último entrenamiento, antes de venir a la tierra, a los hombres. Estaban hablando con el principe de ellos acerca de sus planes para tentar y llevar a los hombres a la ruina.
Dijo el primero: yo les diré que no hay Dios.
Satanás dijo: eso no va a engañar a ninguno porque de sobra saben que hay Dios.
Dijo el segundo: yo les diré que no hay infierno.
Satanás dijo: eso no va a engañar a nadie porque saben que si hay infierno.
Dijo el tercero: yo les diré que no hay prisa, que hay mucho tiempo.
Satanás dijo: vete... Así engañarás a miles.
He ahí la más peligrosa de las ilusiones: "no corra, sobra tiempo". La palabra más peligrosa para el hombre es "mañana". Hay cosas que no se pueden dejar para "mañana" porque nadie sabe si existirá el "mañana" para él.
