¿Qué se necesita?

Necesitamos gente que tengan corazón, que sientan como Jesús con los pobres, los discriminados, los desempleados.
Necesitamos calma en la casa, en el trabajo, en la calle, con la gente.
Necesitamos trabajo y necesitamos descanso.
Necesitamos silencio, una cita diaria con nosotros mismos con la Biblia en mano.
Necesitamos evaluarnos: prever, proveer, revisar.
Si no acabemos de entender, necesitamos el secreto del éxito: el "Evangelio".
No hagamos caso de las promesas de éxito de las propagandas. Escuchemos más bien al "Evangelio".